La exposición de un tejido a la radiación se mide en unidades Gray (Gy). En el caso de los humanos, la dosis letal es de 4-10 Gy. En el caso de las cucarachas, la dosis letal es de unos 64 Gy, unas 6-15 veces superior a la de los seres humanos. Su mayor resistencia se debe al hecho de que sus células se dividen mucho más lentamente por lo que son más resistentes a los efectos de la radiación.
Sin embargo, existen insectos muchísimo más resistentes a la radiación que las cucarachas. Por ejemplo, la dosis letal de radiación en las moscas de la fruta es de 640 Gy, y la de las avispas parasitas de la Família Braconidae es nada más y nada menos que de 1800 Gy, por lo tanto, las cucarachas no son ni mucho menos las reinas de la supervivencia. Como dice el refrán: unos crían la fama y otros cardan la lana.