Son insectos muy distintos morfológicamente. Las termitas son individuos de seis patas con una cabeza bien definida, un par de antenas, con presencia de alas o no, y de color blanquecino. La carcoma, en cambio, es el nombre por el que se conoce a la fase larvaria de varias especies de escarabajos que se alimentan de madera.
En este caso, solamente las larvas consumen madera, por tanto, es la fase larvaria de estos insectos la que se encontrará en el interior de la madera infectada. Estas larvas de cuerpo arqueado y anillos marcados se pueden diferenciar fácilmente de las termitas por el hecho que no tienen ni patas ni antenas.