Las termitas soldado
Las termitas soldado ayudan a reconstruir túneles o paredes rotas del interior del nido, y a reforzar estructuras vulnerables, por lo que a veces se las puede encontrar fuera del nido. Suelen representar un 1-10% de todos los individuos del termitero. Nunca buscan alimento, ya que no pueden alimentarse por sí solas, por lo tanto, a diferencia de las obreras, no dañan la madera.
Cuatro tipos de termitas soldados
Soldados mandibulados.
Son termitas soldado dotadas de grandes mand íbulas, a veces muy largas y de formas extrañas, capacitadas para cercenar y cortar a sus atacantes. Son el tipo más común.
Soldados narigudos.
Son termitas soldado que presentan una cabeza en forma cónica, en cuyo vértice hay un poro conectado a una glándula, denominada glándula frontal, que secreta un líquido espeso y pegajoso que es utilizado para inmovilizar a los intrusos. Presentan mandíbulas vestigiales.
Soldados nasutoideos.
Son termitas soldado del grupo de los Rinotermítidos que presentan una estructura parecida a un hocico con un canal por donde fluyen las secreciones pegajosas de la glándula frontal. Presentan mandíbulas funcionales de longitud y tamaño variable.
Soldados fragmóticos.
Son termitas soldado del grupo de los Kalotermítidos, y se caracterizan por presentar una cabeza muy dura, similar a un tapón, que se utiliza para taponar orificios realizados por intrusos (normalmente hormigas) que quieren entrar en el nido.